martes, 28 de abril de 2009

Supermercados vs almacenes

Construirán nuevo supermercado de una cadena multinacional

Peligra el centro comercial del barrio San José

Las más de veinte cuadras del centro comercial ubicado sobre la calle Salta y alrededores, deberán competir con una nueva sucursal de Carrefour que se planea inaugurar entre abril y mayo. El rubro alimenticio, el más perjudicado.

En Pasco al 2600, ubicado entre las calles San Juan, La Calandria y Kant, y a tan sólo tres cuadras del centro comercial del barrio San José, se está construyendo una nueva sucursal de la cadena francesa Carrefour, principal grupo de venta minorista del país, que según fuentes consultadas, se pretende inaugurar entre fines de abril y principios de mayo de este año. La nueva sucursal se suma así al Jumbo e Easy de Llavallol, al Carrefour y Disco de Adrogué, al Coto de Témperley y a los Discos de Lomas de Zamora y Banfield.

El predio, que abarca una superficie aproximada de 7000m (97x76), era una quinta que estaba ocupada por un chalet de dos plantas. Todavía no está claro si esta nueva sucursal, más pequeña que las anteriores, será sede de un Carrefour o de un Supermercado Norte. Y es que en abril del 2001, los franceses compraron el remanente de acciones de la cadena Norte por un total de 350 millones de dólares y pasaron a controlar tres de las más importantes cadenas de la Argentina: Tía, Día y la mencionada Norte, con ventas que por aquellos años superaban los 3.800 millones de dólares anuales.

Entre los vecinos de San José reina el escepticismo, la pasividad y la indiferencia. Para Mary, dueña de un cotillón que está en el barrio desde hace 22 años, “la nueva sucursal es apenas un mercado. No es un híper. A mí no me perjudicaría en nada. Sí lo haría con los almaceneros. Además se necesita más plata para ir al supermercado y eso no va con esta zona. Por otro lado, en esta área no hay bancos ni cajeros y quizás con la llegada de Carrefour, en ese sentido nos beneficiaríamos todos. Yo creo que activaría un poco la cosa, ya que cuanto más comercio, más actividad y más circulación de gente. Para Lourdes, empleada de una mercería que tiene 55 años en San José “la gente va a seguir prefiriendo ir al almacén. En los supermercados tenés que aguantar las colas, los precios no son tan baratos y siempre terminás comprando de más. El tema es que muchos comerciantes no se van a animar a construir acá por miedo a este supermercado”. Para José Luis y José Manuel, padre e hijo respectivamente y dueños de una fábrica de pastas, fiambrería y almacén desde 1962, “ya estamos curados de espanto. Ya tenemos a pocos metros un Eki y un Día. La calidad de lo que se vende hace la diferencia y la gente lo sabe. Con Carrefour no hay grandes diferencias. El que más nos afecta es el supermercado chino que le compra a los piratas del asfalto, vende productos vencidos y no cumple con la cadena de frío”. A la hora de las propuestas para hacer frene al desembarco de estos gigantes, ninguno de los consultados supo qué responder. Sólo Bárbara de 28 años, encargada de una casa de electrodomésticos lanzó un tímido “los comerciantes no se unen para defender el interés común. Falta organización y el Estado debería intervenir para regular la situación”.

Muy diferente ha sido la reacción de los vecinos de Banfield quienes reunidos en la asociación Fuenteovejuna se opusieron terminantemente a la creación de un Coto en Las Heras e Hipólito Yrigoyen. Razones no les faltan: desde que se inauguró el Coto de Témperley, el 70% de los comercios del centro de esa ciudad se vieron obligados a “bajar la persiana”, según declaraciones del Presidente de la Cámara de Comercio de Turdera, Jorge Origone. Cabe destacar que aún frente la decisión arbitraria y despótica del Intendente de Lomas de Zamora, Jorge Rossi, impulsor de la instalación del Coto y de la modificación de las normas que lo impedían y de su negativa de recibir a los vecinos para discutir el tema, éstos nunca bajaron los brazos. Y más allá de que el Consejo Deliberante aprobara en una Asamblea Extraordinaria –a la que sólo se convoca en casos de urgencia- una medida de excepción al Código de Planeamiento Urbano que prohibía la instalación de nuevas grandes superficies, los vecinos de Banfield hasta el día de hoy continúan movilizados reclamando por que las leyes se cumplan y se termine con la corrupción, la impunidad y los negociados de siempre. Diferente ha sido la situación del Carrefour que se piensa abrir en San José. Allí el permiso lo otorgó el gobierno de la provincia de Buenos Aires y no el municipio.

Para Luis Perdiz, dueño de la inmobiliaria que lleva su nombre, la llegada del supermercado “va a generar el cierre de varios comercios vinculados con la venta de alimentos principalmente. Y al caer las ventas, también bajará el alquiler de los locales y muchos se irán”. Al ser consultado sobre la posibilidad de aumento en el valor de las propiedades que circundan a la nueva sucursal, Perdiz es tajante: “Los inmuebles de San José no van a cotizarse más por estar cerca del Carrefour. Esta es una zona con muchas dificultades, proclive a las inundaciones por el mal entubamiento del arroyo, con varias calles de tierra y villas”.

Durante los años del menemismo la convertibilidad, la apertura económica, la flexibilización laboral, el arribo de las grandes empresas transnacionales y la ausencia de mecanismos de protección al pequeño y mediano empresario terminaron por aniquilar a los comercios minoristas. Los empleados que estos supermercados tomaron fueron jóvenes que recién ingresaban al mercado laboral sin ninguna experiencia gremial o sindical y según una estadística del INDEC por cada puesto que generó la apertura de un super por esos años, se perdieron siete en pequeños comercios como almacenes, verdulerías, panaderías o carnicerías. El avance del hipermercadismo durante la década pasada se dio de manera más que acelerada y careció de cualquier marco regulatorio y control del Estado. Muy diferente a lo ocurrido en los países centrales donde el proceso fue lento y progresivo con normativas que resguardaron a los pequeños comercios y un Estado que garantizó equidad y transparencia en las reglas de juego.

Lo cierto es que en la actualidad, sólo la unión, la organización y el compromiso de los comerciantes y vecinos del barrio San José podrán evitar que la historia se vuelva a repetir.


Propuestas para proteger a los pequeños y medianos comercios

En la mayoría de los países desarrollados no se permite la construcción de grandes cadenas de supermercados cerca de los centros urbanos.

Algunos comerciantes se reúnen y crean paseos o circuitos de compras que incluyen propuestas culturales para atraer clientes y diferenciarse de estas grandes empresas.

En España los hipermercados no pueden abrir los domingos y los feriados. En Alemania la restricción es centralmente horaria: si bien tampoco pueden abrir los domingos sólo están autorizados a hacerlo de lunes a viernes hasta las 18.30 hs y los sábados medio día.

En otros países los hipermercados no pueden vender determinado tipo de productos como medicamentos o bebidas alcohólicas.




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